«Un regalo de niño, lo llevo por el camino de LEGO®»
Hola bricksfanaticos, la semana pasada tuvimos a un chileno, fotógrafo de minifiguras, nos gustó tanto hablar con el que este viernes tenemos a otro chileno, pero que se dedica a armar autos, así que los fans del mundo tuerca amarán este artículo, si conoces a alguno y que además le gusta LEGO®, comparte con él este artículo. Nuestro amigo, modifica y construye a su manera y por estos días termino un MOC de una versión de un taller de servicio para autos y además construyo un Camaro, así es, en chile hay talento, pasemos a conocer al constructor detrás del MOC. Su nombre es Rodrigo Ayrton Riquelme Orellana, tiene 27 años y vive en Las Condes, Santiago de Chile, además es profesor de Inglés, Magister en Neurociencias de la Educación, ¡Bienvenido profesor!
– ¿Hace cuantos años que construyes y coleccionas LEGO® ? Entre construir y coleccionar voy a tener que hacer la diferencia. Colecciono hace muchos años, desde que tenía 4 años en 1997 cuando unos amigos de la familia me regalaron el set 6558 «shark cave», pero el set que me llevó por el camino de la colección tiene una historia más profunda. En el año 1997 mi padre falleció, él y mi madre eran muy fanáticos de la Fórmula 1, razón por la que mi segundo nombre es Ayrton, por el corredor brasileño Ayrton Senna. Él, mi padre, me compro muchísimos autos de juguete que me iban entregando en dosis pequeñas, principalmente los Super Autos (Majorette) que regalaba la estación gasolinera Copec a principio de los 90s. Lamentablemente cuando él falleció en un accidente, dejaron de llegar sus autos de regalo, lo que dejó obviamente un vacío en mi, esto hasta mis 8 años, cuando, jugando a los exploradores encontré una caja que decía LEGO® TECHNIC en un closet. Corrí donde mi madre a preguntarle qué era y ella me contó que mi padre lo había comprado antes de fallecer e incluso lo había armado con sus propias manos ya que el set Technic necesitaba más habilidades que las que yo tenía a los 4 o 5 años. Lamentablemente para muchos fanáticos de LEGO® , eso me llevó por un camino distinto al esperable. Para mi cumpleaños numero 8 me permitieron comprar mi propio regalo del día del niño, pasee con mi madre por el centro de Santiago buscando de tienda en tienda, centro comercial en centro comercial y nada me gustaba. Antes de volver con las manos vacías una prima que trabajaba en una de las tiendas menos populares de la época me invitó a un remate que estaban haciendo y ahí encontré el logo de LEGO® TECHNIC nuevamente, era lo que más quería así que tome el frasquito y lo compre con mis 7000 pesos ahorrados… Ese set de LEGO® TECHNIC era el 8534, Bionicle «Tahu». Ahí empezó un espiral de compras durante 5 años donde todo lo que coleccioné de LEGO® fue Bionicle, pero los detalles no vienen al caso. Siempre me moví entre Bionicle, Star Wars y Hot Wheels como coleccionista, tengo unos cuantos autos en escalas superiores, muchos juegos de carrera, heredé el fanatismo por el deporte motor de mis padres y soy seguidor de eventos tan tediosos como las 24 horas de Le Mans así como de la emocionante Fórmula 1 y por falta de opciones ofrecidas por LEGO® , nunca combiné el amor al automovilismo con el amor por los ladrillos plásticos. Eso cambió el año 2015, porque aunque fanático de la Formula 1, nunca fui fanático de Ferrari, de hecho hasta me caen mal, pero aquel año se lanzo Speed Champions, No solo habia formula 1 de Ferrari, tambien estaba Mercedes-McLaren, Porsche, Corvette, y otro sin numero de marcas que comencé a comprar porque amé el estilo caricaturizado que ofrecía la linea. Cada uno de estos sets venia con algun complemento; un carrito de herramientas, un muro de garage, un podio, etc. Complementos que fui uniendo en un solo espacio mientras la colección de autos aumentaba. Esa suma de complementos fue mi primer MOC involucrando bricks…
– ¿Usas algún software para tus diseños o construyes usando piezas reales? Fue una evolución orgánica, mezclaba partes de sets, iba a mercados al aire libre, compraba kilos de piezas sueltas que me pudiesen servir, sin tener nada claro en mente, y las sumaba a los complementos. Eventualmente estos complementos tomaron forma de una esquina de garage, el primer acercamiento a un «diorama» para poner los autos y tomarles fotos o algo así. Entre más sets compraba, más complementos se unían a esta extraña mezcla, un dinamo, un túnel de viento (que son cosas para medir el rendimiento de un auto, pero dentro de 4 paredes), más cajas de herramientas, más mecánicos, más repuestos y más piezas que tenía que comprar para amalgamar todo… Creo que ni siquiera diseñe mi creación… fue creciendo de acuerdo a las necesidades de la colección, completamente espontáneo, lo que significó un tedio enorme el realizar modificaciones o incrustar complementos en la estructura ya que por la falta de planificación, había que desmontar prácticamente toda la creación y despues de eso, nunca quedaba igual que antes. Fue todo muy loco
– ¿Que te inspiro a construir? La inspiración sale del gusto por el mundo tuerca y por el amor a LEGO® , como mencioné antes, mis autos necesitaban un lugar donde recibir mantenimiento, cambios de aceite y pruebas varias, no podía seguir usando este desordenado armatoste de complementos unidos el uno al otro con piezas al azar… era básicamente un monstruo de Frankenstein y podías ver las suturas hechas con piezas de colores que no combinaban pero para nada! Había que hacer algo bueno y ordenado, fácil de desmontar y modificar y había que hacerlo luego porque me estaba quedando sin espacio para más complementos. El color predominante en estos accesorios era el rojo (Gracias por tanto, Ferrari) asi que la decisión de color estaba clara, el nuevo proyecto sería rojo, pero que? pensé en hacer un Salón Automotriz, pero muchos de los complementos eran accesorios de desarrollo de autos y no calzaban en un lugar de ventas. La verdad no tenía idea que hacer. Para el 2016 hubo un gran retorno en el mundo del automovilismo. Desde ya casi 100 años se viene realizando una carrera anual de resistencia llamada las 24 horas de Le Mans donde en efecto los autos compiten durante 24 horas y el año 2016 volvería a las pistas uno de los más icónicos autos de esa competencia; el Ford GT (que me gustaba mucho porque era el auto que maldijo a ferrari, le ganó en el 1966 y continuó hasta tener 4 títulos consecutivos, Ferrari no volvió a ganar en Le Mans nunca más). Esta vuelta a las pistas me hizo querer investigar todo al respecto. Cómo se desarrolló el auto, quien estuvo a cargo, donde, cuando, etc. Asi di con Shelby American y Carroll Shelby, su dueño, que compraba pedazos de autos por aqui, cuerpos de autos por allá, los probaba, modificaba, exponía y vendía en un solo local. Eso me inspiró a hacer lo mismo en LEGO®, un solo lugar donde se arreglaran autos, donde se modificaran y desarrollaran cambios, y donde se vendieran autos completos, piezas, etc. De ahí me basé en varios garaje famosos de USA; West Coast Customs, Donut Garage, Gas Monkey, etc. Ya tenía claro que quería hacer. Ahora solo faltaba hacerlo. Así nacía el «Garaje Redline Customs».
– ¿Cuánto tiempo te llevó construir tu modelo? Redline es un trabajo en proceso. Un hijo que va creciendo y que tienes que comprarle ropa nueva a medida que crece… En pocas palabras, no estoy ni cerca de terminarlo y posiblemente nunca lo termine del todo. Si, en las fotos se ve bastante completo pero ese garage de muros blancos es así desde hace un par de meses. Durante la creación del modelo le fui creando una historia y también a sus minifiguras, cada una tiene su personalidad, si les tomo fotos, tiene sus poses claras, es todo muy loco. La historia cuenta que hace X años este edificio era una estación de bomberos que se quemó (oh, la ironía) y que alguien compró el terreno para hacer viviendas de lujo pero el municipio le dijo que no, así que se lo heredó a su hija quien junto a sus amigos lo transformaron en un restaurado edificio rojo que en su interior era un garaje. Por qué cuento esto? Porque el garaje era rojo con una línea blanca y todo el mundo me decía «que linda tu estación de bomberos», llegó un punto en el que me aburrí, lo desmonté y le atravesé una bandera a cuadros por la mitad. El problema era que a mi no me gustaba. Decidí cambiar toda la estructura a blanco y gris con una línea roja separando el primer y el segundo piso… aun no termino de cambiar a blanco el primer piso… así que en la teoría, el modelo aun no lo termino. A su vez decidí hacerle un taller de pintura en el patio, estacionamientos y unas cuantas entradas, así que como verás en las fotos, el exterior es un sitio vació. Como dije, es un trabajo en progreso constante que voy a ir cambiando según estime sea más bonito o a medida que mis habilidades como constructor mejoren.
– ¿Cuantas piezas tiene tu modelo? El ultimo conteo en LDD era de 5670 piezas, incluye 5 autos que le suman 750 piezas más, una nueva salida a la azotea y ventilación que suma unas 200 piezas más y 24 minifiguras de 7 piezas cada uno… Son poco más de 6700 piezas sin contar el exterior (una caseta de seguridad, un taller de pintura, 3 camiones de transporte y todos los tiles para cubrir el patio más el muro perimetral) no me extrañaria superar las 10.000 piezas a futuro.
– ¿Algún mensaje para los constructores de chile? Los constructores saben lo que hacen, la práctica hace al maestro. Yo no puedo ser más humilde al respeto, tengo muchos amigos que llevan años construyendo y sus creaciones son increíbles! yo me siento un novato por completo, llevo 4 años creando con LEGO® y me comparo con ellos cada día. En un principio me decía a mi mismo que mis creaciones son básicas, tienen pocas piezas, son «planas» y supongo que muchos piensan igual cuando ven lo que arman, y lo único que puedo decir es «¿que importa?», como vas a ser mejor si no prácticas y por sobre todo, si no juegas bien , si no disfrutas y solo te comparas. Mi garaje tiene muchas debilidades pero me encanta porque me alegra modificarlo y modificar autos, aunque sean de LEGO®. Hay que disfrutar del juego y de las creaciones y de a poco uno mejora. Lo que sí me gustaría agregar va para las jóvenes constructoras. En la foto del personal del garaje puedes ver una gran cantidad de personajes femeninos. En bata blanca está la ingeniera, ella trabajaba para Ferrari (venía en un set de Ferrari que fue expropiado) y ahora trabaja en este garaje, a su lado hay 3 mecánicas, en el centro hay otras 2 más, en total hay varias chicas metidas en el mundo de este garaje de LEGO® y creo que como sociedad aún estamos al debe en lo que respecta a acabar con los estereotipos. Los adultos tenemos que entender… Los padres tienen que entender que si una niña quiere jugar con autos hay que dejarla, eso no la va a hacer menos niña. Permitirle jugar con lo que quiera solo la hará más independiente y empoderada. Digo esto porque hace un par de años lleve mi garaje a una expo y una niña se acercó corriendo, quería verlo por dentro y ver los autos muy emocionada. Yo me disponía a abrirlo cuando la madre llegó a decirle que no me molestara y que eso era de niños. Lego es para todos, dejemos que la imaginación de los niños y niñas fluya fuera de los estereotipos.
– ¿Alguna cosa más que nos quieras contar acerca de ti, perteneces a algún club o lug de LEGO®? Bueno, pertenezco a Chile Nui Bionicle +. Nos enfocamos en crear varias cosas con piezas de todos los estilos dándole un poco más de fuerza a las piezas de Bionicle y CCBS, pero eso ha de ser para otro publico. Y bueno, para la última Brickfest de Chile LUG (donde fui con mi garaje, traicionando a Chile Nui) me entregaron el brick de 1×6 con mi nombre, así que me siento su hijo adoptivo. Soy profesor de inglés, hago clases los jueves, no cobro mucho (es una referencia a Shrek, si quieres la dejas) y vivo con mi polola, con la que ya nos tratamos de marido y mujer, solo nos faltan los trámites legales pero el amor está ahí más fuerte que el día anterior. Ella me ha apoyado en todos mis proyectos e incluso, la terraza del garaje donde hay un quincho, unos maceteros , un taca taca y otras decoraciones fueron creación de ella, también la cocina y el diseño de espacios en general de las áreas de descanso de Redline Customs. Le agradezco mucho el incitar a armar y crear cada día, ella me regalo, a solo meses de conocernos, el hermoso camión de la Scuderia Ferrari de Formula 1 (que si bien, la marca me cae mal, como deportistas los admiro mucho) y fue lo más lindo que recuerdo en este contexto de LEGO® en particular. Recuerdo que me emocioné hasta las lagrimas solo por el gesto.
– ¿Alguna vivencia o anécdota durante el armado de tu creación? Más allá del rediseño constante, los cambios de color y moverlo de un lado al otro del departamento, no hay mucho más que agregar. Igual, el ultimo cambio de color significó desarmar todo el garaje… mis dedos rojos, mis uñas cuadradas y los separadores de piezas naranjos ya no servían su propósito. Fácil me dedique unas 5 o 6 horas de corrido a cambiar piezas. Fue una locura. constructores, hagan sus edificios MODULARES, no sean novatos como yo, después se pagan las consecuencias. No fue la primera vez que lo desarme, lo que solo me deja como más novato porque no he cambiado la construcción aun cuando no me han faltado oportunidades. Lo desarme por primera vez para pasarlo a LDD cuando solo eran 2500 piezas y ahora pretendo llegar a las 10.000, que locura. También diseñé la antigua estación de bomberos en Stud.io y ahora quiero armarla, pero no hay piezas ni espacio. Supongo que ese es el colmo de los constructores, tener la creatividad pero que te falten los recursos. Pero las risas no faltan.
Asi es amigos, siempre faltan piezas y espacio, la creatividad no para, pueden ver esta y otras creaciones en la cuenta de Instagram y de facebook de nuestro amigo.
Recuerden amigos, No paren de Crear!
Equipo BiB